Todas las mujeres queremos poseer una piel tersa, hidratada y llano de líneas de expresión. Pero en muchas ocasiones nos olvidamos de los cuidados que debemos poseer, ya que hay quienes tienen la dogma de que se necesitan costosos cosméticos de belleza para contrarrestar los signos del paso del tiempo. Sin embargo, hoy te demostraremos que no es así. En este momento, traemos para ti una maravillosa mascarilla que además de limpiar de impurezas tu cutis, te ayudará a alejar las molestas arruguitas que aparecen con el paso del tiempo. Y lo mejor de todo es que para esta receta para una limpieza completa de rostro solo necesitas dos productos que posiblemente, ya tienes en tu cocina: Bicarbonato de sodio y aceite de coco.
Esta mezcla es completamente segura de usar y no contiene productos químicos nocivos o toxinas. Tiene un efecto sorprendente en cicatrices, acné, enrojecimiento, exceso de suciedad y grasa y lo mejor de todo, es que eso contribuye a que poco a poco tus arrugas vayan desvaneciendo.
Beneficios del Bicarbonato de sodio para la piel
Tiene la capacidad de eliminar las células muertas de la piel
Aclarante natural
Elimina puntos negros
Excelente humectante
Contribuye a tener una textura suave y tersa de la piel
Beneficios del aceite de coco
Nutre y humecta la piel
Evitan los radicales libres que provocan envejecimiento
Reduce hinchazón
Es rico en vitaminas que rejuvenecen la piel
Reduce ojeras (aplícalo alrededor de los ojos suavemente con el rostro bien limpio antes de dormir y deja actuar toda la noche. Al día siguiente, enjuaga con abundante agua).
Notarás cómo en pocos días tu mirada mucho más luminosa. El aceite de coco tiene fuertes cualidades curativas, hidratantes y antibacterianas que benefician la piel mientras la nutren. La mezcla de estos productos crea una combinación segura y efectiva, incluso en pieles sensibles. Ten en cuenta que el aceite de coco extra virgen, proporcionará los mejores resultados.
MASCARILLA ANTIARRUGAS DE BICARBONATO Y ACEITE DE COCO
Ingredientes
1 cucharada de bicarbonato de sodio
1 cucharada de aceite de coco
Las cantidades pueden variar, dependiendo la textura que obtengas. Es decir, necesitas una mezcla ni muy líquida ni muy sólida. Lo ideal para que se mantenga en tu piel. No olvides que las mascarillas también deben ser aplicadas en el cuello, ya que muchas nos olvidamos de esta zona del cuerpo y tenemos una rostro luminoso pero un cuello descuidado.
Preparación
Combina los dos ingredientes hasta conseguir una mezcla homogénea. Ojo: el aceite de coco tiende a solidificarse en ambientes fríos, así que si es tu caso, deberás derretirlo a baño maría para que sea líquido y así poder mezclarlo más sencillamente. En caso de que tu aceite esté líquido, no será esencial este paso.
Aplicación
Una vez que has mezclado perfectamente los ingredientes, aplica la mezcla en tu rostro previamente lavado con jabón neutro y bien seco. Puedes masajear tu piel suavemente con movimientos circulares. Deja que la mezcla actúe de 15 a 20 minutos y después retira con agua tibia.
¡Y eso es todo! Esta mascarilla es una excelente alternativa para eliminar impurezas ayudándote a retrasar el envejecimiento. Lo mejor de todo es que es muy rápida y fácil de hacer. ¿Qué esperas para probarla?
Comentarios